Cuando Karen y su pareja se mudaron de París a Londres, estaban emocionados por la nueva aventura, pero amueblar una casa en una ciudad nueva con un presupuesto ajustado les parecía un desafío enorme. Explorar mercadillos de segunda mano se convirtió en su rutina, siempre en busca de las mejores ofertas. Entonces, por casualidad, todo cambió.
“Estábamos comprando un televisor de segunda mano a una pareja del barrio, y nos recordaron de la existencia de Olio”, recuerda Karen. “Volvimos a descargar la app, ¡y sinceramente ha sido un salvavidas!”
Desde ese momento, Olio ha ayudado a Karen y su pareja a convertir su casa en un hogar, sin gastar una fortuna y dando una segunda vida a objetos en perfecto estado. Su salón es una prueba del poder de compartir: una mesa de comedor, sillas, un sofá cama, cojines rojos, una mecedora e incluso un reposapiés, todo rescatado de vecinos a través de Olio.
“Mi hallazgo favorito son, sin duda, las sillas. Son preciosas, como algo que verías en un museo de diseño.”
Pero para Karen, Olio no es sólo una app para amueblar su casa. Descubrió la plataforma por primera vez en la universidad, usándola para rescatar comida y ahorrar dinero. Ahora, en Londres, sigue con esa misión, recogiendo excedentes de supermercados e incluso de rodajes en estudios de cine cercanos.
“Ha sido increíble, tanto para comer la comida nosotros mismos como para compartirla con la comunidad. También hemos dado muchas cosas, lo cual es muchísimo más gratificante que tirar algo que aún se puede usar.”
Uno de sus momentos más satisfactorios fue responder a un anuncio de ‘Se Busca’. “Un vecino tenía una pantalla de lámpara, pero le faltaba la base… y justo nosotros teníamos la pieza exacta que necesitaba.”
Más allá de los artículos gratis y la comida, Karen ha encontrado algo aún más valioso: un sentido de comunidad.
“Cada interacción que he tenido ha sido encantadora. La gente a la que recojo cosas está feliz de liberar espacio, y solemos hablar de su siguiente paso, ya sea mudanza, renovación o simplemente hacer limpieza. Se siente realmente como una comunidad de personas que quieren evitar el desperdicio y ayudar a sus vecinos.”
¿Qué es lo que más te gusta de usar Olio?
“Lo mejor de Olio es la facilidad para que la gente pueda conectar. No se trata sólo de compartir, sino de amabilidad, conexión y de saber que cada pequeño acto ayuda a reducir el desperdicio. Realmente sientes que formas parte de algo más grande.”