Cómo el voluntariado con Olio ayudó a Teresa a redescubrir la alegría y la amistad
Teresa, de Newcastle, conoció Olio por primera vez en 2020, durante la pandemia. En ese momento, descargó la app y la dejó olvidada en su celular. No fue hasta cuatro años después, en 2024, que Olio llegó de verdad a su vida.
“Pedí algo a un Héroe Recolector de Alimentos y me dijo: ‘¿Por qué no te haces voluntaria tú también? Serías una gran aportación para Olio.’” Así que Teresa se animó. “Hice mi primera recolección, luego la segunda… y listo – ¡me enganché!”
Pero lo que jamás imaginó fue el enorme impacto que tendría el voluntariado en su salud mental.
“Antes de Olio, casi no salía ni convivía con otras personas. Pero cuando empecé a recolectar comida, noté que me sentía mejor. Ya no me sentía tan triste.”
A Teresa siempre le ha encantado el reciclaje, las manualidades y evitar el desperdicio – así que encajó perfectamente. “Después de unas semanas, empecé a hacer amistades… de las buenas. Nos juntamos a tomar algo, charlamos por WhatsApp, y siempre estamos ahí unas para otras.”
Hoy, casi un año después, Teresa no sólo es una Héroe Recolectora de Alimentos comprometida – también es Líder de Brigada en dos grupos y ha hecho cerca de 400 recolecciones. “Eso significa mucho para mí. Me demuestra que soy capaz de hacer cosas que antes no me atrevía.”
Para su 50 cumpleaños, las amigas que ha hecho a través de Olio la sorprendieron con regalos hechos a mano – una tarjeta de una hija de otra voluntaria y detalles hermosos de su amiga Gill. “Me hizo sentir muy querida.”
También formó una amistad especial con Russell, su “compañero de escaneo Olio”, quien la apoya en las recolecciones de Sainsbury’s. “Somos como mejores amigos. Le hice una tarjeta de agradecimiento hace poco – tiene más de 60 años y aún así trabaja muy duro.”
Desde que se unió a Olio, Teresa ha podido reducir su medicación con el apoyo de su doctora, y dice que se siente más feliz y saludable de lo que se ha sentido en muchos años.
¿Qué es lo que más te gusta de Olio?
“La gente. Las conexiones, las amistades, esa sensación de que perteneces. Ser voluntaria en Olio me ha cambiado la vida – estoy haciendo algo valioso, ayudando a los demás, y por primera vez, me siento orgullosa de mí misma. Lo estoy disfrutando muchísimo.”